domingo, 11 de noviembre de 2012

FOTOGRAFÍA SALLY MANN. Cristina Martín Garrote


Sally Mann es una fotógrafa nacida en Lexington (Virginia) en el año 1951. Comenzó su carrera artística fotografiando en su Instituto y continuando en su etapa Universitaria, donde estudió Escritura Creativa. Sus trabajos han tenido gran relevancia, desde su primera exposición en la Corcoran Gallery of Art, Washington D.C., en 1977.

Los temas que abarca en sus fotografías van desde sus hijos, animales, lugar de residencia, la muerte o su mismo marido. La fotógrafa tiene en común en todas sus obras el reflejo que quiere dar de la búsqueda del paso del tiempo y de la vida. 







Esta fotografía forma parte de su trabajo “At twelve”. En este trabajo la artista recoge 35 retratos en blanco y negro, centrando su interés en la evolución de la mujer. Sally Mann fotografía a niñas que viven cerca de su casa en Lexington, Virginia. Donde intenta reflejar la evolución de niña a mujer, recogiendo los gestos, miradas, forma de los cuerpos, etc…Estas imágenes constan de elementos tanto preparados como espontáneos, llevando a imágenes que intenta transmitir gran sentimentalismo. Un ejemplo de esto lo podemos encontrar en esta fotografía. 

La imagen refleja una niña en plena transición a mujer. La fotografía esta hecha en blanco y negro, lo que nos transmite una facilidad para destacar las formas, el volumen, eliminando el protagonismo del color. El protagonismo por tanto se le quiere dar solo a la figura femenina, ya que solo se resalta su imagen, recayendo la iluminación en la niña.En la composición fotográfica, la fotografía encuadra la figura que quiere ofrecer, ofreciendo un primer plano de la niña, en el centro, situando fuera el paisaje que queda al fondo, dejando a la imaginación lo que hay detrás, jugando con las luces y las sombras y diluyendo el fondo, dejándolo desenfocado de la fotografía

Por otro lado la fotógrafa juega con las luces, sombras y el brillo de la imagen para resaltar el cuerpo de la mujer y sus formas. En este caso, no podemos ver la expresión de la niña, su mirada, facciones de la cara, etc... De algo simple y sencillo, hace un trabajo complejo, que lleva a pensar que conlleva esa imagen. Todo esto queda a juicio del observador, que puede interpretar según su propia valoración lo que nos quiere decir con su posición corporal, la colocación de los brazos e inclinación de la cabeza… Todo esto hace pensar al que observa la fotografía lo que la artista quería transmitir, generando un sentimiento de reflexión e interés en el espectador.




Cristina Martín Garrote
Para más información sobre Sally Mann consulte su pagina web: http://sallymann.com